Estoy casado
tengo seis hijos, dos son profesionales peluqueros, otro administra un salón y
los más pequeños amén de su carrera universitaria colaboran con la
administración. El grupo Pichannios cuenta con con cinco salones en Ripollet. Me
gusta el ciclismo, realizo a la semana unos 50 kilómetros y diariamente troto
cinco km a lomos de mi labrador. Completo todo ello con tres horas semanales de
barra fija en gimnasio. Leo libros de autoayuda y todo lo que me ayude a
realizar mejor mi tarea.
¿Tus estudios
tienen que ver con la actividad actual?
Tomé cursos de
actualización en cortes en : Vidal Sasson, Tony y Guy, Jean Louis David ,
Llongueras. Cada dos años viajo a París y Londres para actualizarme en lo
último para la peluquería.
¿Cuál es tu
proyecto de futuro en lo personal?
Un nuevo salón
que estará listo a finales de 2012 y remplazará al primer salón que pasará a
ser un centro de entrenamiento de peluquería.
Si pudiésemos
saber a ciencia cierta que el mundo se acaba en 24 horas ¿qué harías en ese
tiempo?
Reuniría a toda
mi familia y a Dani en una gran fiesta y así esperaríamos el encuentro con
Dios.
Y…¿Qué harías
si te tocase una primitiva de 2 millones de euros?
Trataría de no
alterarme en primer lugar y luego los disfrutaría con mi mujer viajando por el
Vallès.
¿Cuándo
pensaste que esta sería tu actual actividad?
Nunca pensé en
ello; cuando cursaba el primer curso a los 13 años no quise estudiar y mi padre
que tenía una peluquería en pleno Barrio Norte de Ripollet me llevó a barrer el
salón y aquí estoy después de muchos años, realizado plenamente profesional y
personalmente.
¿Esta actividad
tiene antecedentes familiares?
Permíteme que
te responda con otra pregunta: ¿eres tonto? ¿escuchas las respuestas del
entrevistado?
¿Cómo conoces a
Dani Senabre?
En clase de
pilates, en el DIR. Siempre me pareció gravemente enfermo y micropénico; pensé
realmente que padecía tuberculosis o ébola. Hablé con la instructora y me dijo
que ella no lo tocaría ni con un puntero láser, que ese tío era rarísimo,
posiblemente un homicida. Cómo tengo un gran corazón me aproximé a él y me
abrió el suyo.
Qué ocurre a
partir de ahí?
Nos acostamos y
entablamos una relación extra-marital. Fue por ese entonces cuando tomé
conciencia de su enfermedad y intenté estar siempre a su lado, a pesar de los
improperios de mi mujer, menuda es ella.
¿Cómo surge el
peinado ‘Peluca on fire’?
Fue en una
recepción en la zodiac de Lluís Lainz, en el descampado ese en el Besós. Nos
pusimos moraos de coca y ácido, y en esas que encontré unas tijeras oxidadas, pillé
al sifilítico por banda y le hice un roto de cojones. Nos pasamos no menos de
media hora descojonándonos. Mi sorpresa fue cuando al cabo de 3 semanas se
presentó en la peluquería pidiendo que le volviera a hacer lo mismo. Sería el
año 94. Y de ahí hasta ahora; el peinado de tontolculo cada mes, sin
desviaciones.
Hablemos de tu
actividad. Intenta en muy pocas palabras describirnos a qué te dedicas.
Mi actividad
principal es cortar, crear look a mis clientes en todo lo que atañe al pelo.
¿Cómo afecta la
crisis a tu actividad?
En esta
actividad la crisis nos toca las pelotas, y nos ha forzado a crear estrategias
para que la clientela necesite más de nuestros servicios. Obviamente ni
exploramos ni ejecutamos ninguna de estas estrategias, nos la pela todo. Somos
peluqueros.
¿Cómo ves el
futuro de tu sector?
Por estar
dentro de la moda el futuro es muy bueno y te diría que el éxito siempre
dependerá de la capacidad creativa del profesional. Podría decirte lo
contrario, es un tema del que prefiero no hablar por hallarlo absurdo. ¿Una
copa?
¿Dedicas a tu
actividad demasiado tiempo?
Tal vez de más
pero así aprendí así me formé y me da buenos resultados económicos. Soy muy
rata.
¿Qué cosas
harías si tuvieses más tiempo libre?
Pasaría más
tiempo con mis macetas. Vaya mierda de pregunta, recristo.
Si pudieras
volver hacia atrás ¿repetirías?
No. Me
arrepiento de todo y si pudiera volver a nacer me suicidaría en cuanto me
dieran las primeras tijeras.