SPOILERS HASTA ABURRIR
Madre de Dios qué chapa.
Westworld es, usando terminología civil, infumable.
Desperdicia un punto de partida excepcional de una manera que roza lo
hiriente.
Los 3 primeros episodios, mientras desvela los entresijos de la
operativa, son interesantes, desafiantes, y corazonadores.
A partir del cuarto, cuando empieza a hilvanar historias torpemente
conectadas y con desenlaces a la sazón tétricos, resulta narcótica.
Tardé 12 noches en fumarme los últimos 5 capítulos; parecía que en el
comedor de casa hubiera escondido un mono con dardos tranquilizantes que me
pegaba un tiro cada noche a los 20 minutos de darle al play.
De las 10h 20m de metraje habrá no menos de 6 centradas en gags
risibles en el far-west, incongruentes, absurdos, redundantes y vomitivos.
Para el viaje del conocimiento de los procesos mentales de Dolores no
hacían falta tantas alforjas; con una bastaba. A pesar de estar buena de
cojones (y recordarme a Robin Wright) terminé odiando a Dolores y sus putos
cruces de cables.
Luego todo el hilo de la majestuosa Thandie Newton (*) y su puticlub:
tantas horas invertidas en ese hilo para terminar en… ¿qué cojones? Tiempo
desperdiciado.
Timothy, el vaquero guapo, el que lleva una empanada de siete pares…¿Qué
cojones saco yo de las 2h de pantalla que se levanta el chaval? Nada. Al menos Thandie Newton (**) nos muestra sus cocos un aggregate de 40 segundos.
Realmente aprovechable sólo hay cierta cinematografía (la del lab,
pues las escenas outdoor del Oeste parecen filmadas para un proyecto de final
de curso), y ciertos diálogos entre Hopkins, el negro y alguno con un androide.
La trama daba para 4 capítulos a lo sumo. Ni leí el libro ni miré la
peli del ’74 (lo haré esta noche) pero esa serie es un puto galimatías estéril.
Pasadas las primeras 4h y el lento agonizar hasta el finale, más allá de ver si
Ed Harris es Arnold o no y las 4 polladas, el desenlace sólo podía ser este,
una fuga, o un wipeout de los hosts y un retorno a la casilla uno.
La verdad, 10 horas mal invertidas. Ni tan sólo Ed Harris tiene credibilidad, sólo
el viejo Hopkins araña buenos minutos ahí.
Y los cocos de Newton.
SELL
(*) Que está tan buena que tiemblo al pensar en ella. No sé si tiene
23 años o 48 de lo PERFECTA que es.
(**) 44, tiene mi edad y parece mi hija. Que Dios le conserve la
suculencia. No soy el único que se pregunta su edad: