viernes, 21 de septiembre de 2012

Cositas (y I)


Es siempre interesante señalar cositas de esas, ¿eh?
Hoy nos centraremos en dos casos destacables.

A-Las gomitas para el pelo, como esta:


Durante años se han usado para que las niñas se recojan el pelo, y me contaba un empresario del sector el otro día, que su demanda se ha casi duplicado en los últimos años de manera inexplicable. Cuando me disponía a explicarle el porqué con excitación infantil, él ya me lo dijo: por el golf. En efecto, las gomitas estas, amén de recoger el pelo, son capaces de albergar una bola de golf encima presentando dos ventajas que a los golfistas no les pasaron desapercibidas:
     1-Que dejan descansar la bola a una altura uniforme, con lo que el golfista siempre trabaja con un tee de idéntica altura.
     2-Que tras el golpe vuelan y caen despacio y se pueden encontrar y recoger fácilmente.
Big win. Ahora la mitad de las ventas son a golfistas que las usan como tee. Grande. Cuando mi mujer encontró la primera hubieron ceños fruncidos.

B-El milagroso efecto del FAX.
Durante años, de los 90 a los mid-2000s, se usaba como medio de transmisión de info. Con la aparición del email se virtualmente extinguieron, si bien casi todas las oficinas siguen teniéndolos por ahí abandonados pero enchufados. Durante la proliferación del FAX ('los años del plomo'), el caudal de faxes recibidos era tal que nadie les metía mano y se comían todo el papel (recuerden la sede de la LFP los 31s de Agosto recargando el papel cada dos horas).
El FAX acabo resultando en abandonware. ¿Pero qué sucede ahora? Que cuando en la oficina la máquina de FAX empieza a hacer ruido, todo el mundo queda paralizado/acojonado y acude raudo en búsqueda de ese presunto mensaje de algún tarado o de inteligencias extraterrestres. ¿Quién pollas habrá mandado un FAX a Septiembre del año 2012? Pues me contaba un alto rango de una empresa de software empresarial que mandar un FAX se está convirtiendo en una poderosa herramienta para gestión de cobros u otras lides corporativas. El FAX finalmente sí llama poderosamente la atención del receptor, es un poco como recibir una carta manuscrita en el correo.. Tiene su cachondeo, ¿eh?

Mañana hablaremos de la paradoja de los teclados de abajo a arriba para PCs/calculadoras y de arriba abajo para mandos a distancia.
O de la paranormal inexistencia de la FANTA limón en Italia. No hay una sola unidad en stock ni nunca la hubo.
Qué gran post!

13 comentarios:

DavidG dijo...

y los condones de punto de cruz que? marginados con el gustico que dan

HRubesch dijo...

Gran post, sí.

Esta mañana también he hecho un regreso al pasado pues he estado buscando en mi colección de CDs el "Sound of white noise" de Anthrax, sin éxito, para uso y disfrute del astilla nº1. Recuerdo cuando los CDs eran el novamas de la modernez y ahora están ahí pudriéndose en cualquier rincón de casa. Esta tarde me lo bajo con el uTorrent.

General Fórceps dijo...

Efectivamente. Yo tiré al container todos los CDs quemados por mí y me quedé con esos 6 originales. Los echaré al container pronto, son inútiles.

P.D.: No tengo ni lector de DVDs, eso sí que acojona.

Rafadalton dijo...

Mandos a distancia... y teclados de cualquier teléfono.

Y lo que cada vez hay menos son las gomas elásticas de las hueveras.

Anónimo dijo...

Jo he pres fanta llimona a italia. Any 89. Recordo que tenia tropessons de llimona, com volent fer veure que havien expremut llimones de debo per fer-la. El primer que vaig fer va ser mirar la data de caducitat.

Rummi

Anónimo dijo...

Bon post.

Jo utilitzo les gometes aquestes per aplicar-me-les a la base de la retranca i perllongar la durada de l'erecció de 3 a 5 hores.

Pel que fa al FAX, apenes l'utilitzo a la feina, però a casa encara tinc un TÉLEX mitjançant el qual n'Oscarini m'encia fotos seves amb picardies en blanc i negre.

Rai

Semen-up dijo...

Gracies Rai!
Quan he llegit que s'havia doblat el consum de les gometes jo també he pensat en l'aplicació que tu comentes i no pas en l'ús que en puguin fer els golfos, perdo golfantes, de via estreta (doncs el factor econòmic segur que és la raó més important del seu ús i no pas la seva practicitat).

Per cert, i que em corregeixi algú si m'equivoco, però jo diria que els faxos tenen valor judicial, vull dir que serveixen com a "prova de.." (si més no, els burro faxos) mentre que els mails, no.
Només per això, ja cal conservar-los, de moment.

oscarini dijo...

Rai, tontu, a ti la gomita en cuestión te sirve perfectamente de preservativo pues te cubre a la perfección, base, palo y glande. Y por ello, lo de la durada de la erecció fins a 3 horas, es irrelevante. Recomendamos Vender.

El fax, como bien dice Semenup, con su acuse de recibo, bien sabe Posi que es un arma arrojadiza, no al extremo que el borofax, pero de mayor relevancia judicial.

El post costumbrista de hoy me ha gustado. Sigue así bobito.

General Fórceps dijo...

cruasán

Jordi dijo...

En mi empresa los fax llegan vía mail, con lo que el efecto es nulo.

En cuanto a las gomitas, creo que van bien para el sexo tántrico, pues bien aplicadas retardan la explosión de felicidad. Think about it.

Tal vez por eso tu mujer puso mala cara...

14 dijo...

"Hay estudios que indican que el colorante E104, llamado amarillo de quinoleína, incrementa la hiperactividad en los niños y causa dermatitis. El uso de este colorante está prohibido en Estados Unidos, Australia, Japón y Noruega. Contener el ingrediente E104 es una de las causas por las que no existe Fanta Limón en numerosos países".

JoanCG dijo...

Raro que las "marcas" no le hayan metido mano al negociete.

La primera vez que vi CD's colgando de los árboles, como espantapájaros, sentí un escalofrio en la punta del paisaje.

Creativo el (y I)




Anónimo dijo...

Hay mucho cateto suelto que todavía usa el Fax para hacer pedidos. Es poco explicable teniendo en cuenta los años que hace que existe el correo electrónico.

En muchos paises puedes encontrar algo muy parecido a la Fanta llamado Orangina.

Ant.

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Seré conciso. H ay cientos de libros que cuentan esto en 400 páginas. Yo lo he hecho en dos, o sea que las gracias me tendríais que dar, ing...